Más de 300 sonrisas se dibujaron a través de dinámicas.
La comunidad indígena Únuma se encuentra ubicada en Puerto Gaitán, Meta, y es el único resguardo indígena en el casco urbano del municipio. Representa la forma de organizar la vida y el trabajo colectivo del pueblo sikuani. Por ello, el Ejército Nacional reconoce y respeta las diferentes culturas acentuadas en el territorio, y hasta aquí llegaron los soldados del Batallón de Acción Integral N.°4 del Ejército Nacional, para desarrollar una actividad lúdica y de integración para más 300 niños de 5 a 12 años, con el propósito de generar lazos de confianza y acercamiento.
A través de dinámicas grupales como el baile, el canto, globoflexia, juegos lúdicos y juegos inflables con los menores y sus familias, los soldados lograron ganarse el corazón de los participantes.
«Al Ejército Nacional agradecerles, porque estas actividades para nosotros son buenas obras con nuestra comunidad indígena, es ahí donde nos damos cuenta de que se preocupan no sólo por la seguridad, sino también por el bienestar de nosotros», expresó Mauricio Rosales, capitán y líder del resguardo indígena Únuma.
Según datos suministrados por habitantes del mismo resguardo, son siete hectáreas que conforman su pueblo indígena, donde viven cerca de 1.500 personas en casas provisionales, armadas con tablas, plásticos y lonas por desalojos.
Por eso, con estas actividades el Ejército Nacional hace presencia institucional en el territorio, demostrando a toda la población el trabajo continuo de velar por el bienestar e integridad de las comunidades más vulnerables del país, así lo indicó también el suboficial Jerfi Jair Estupiñan Cabrera del Batallón de Acción Integral N.°4: «Llevar felicidad a los colombianos y respetar sus raíces es de suma importancia para nosotros, pues a través de acciones que promuevan el respeto construimos un país en paz y en armonía, sensibilizando a la comunidad a que la tolerancia es el pilar para entender al otro», indicó.
Con estas acciones y en el marco del Plan Ayacucho, el Ejército Nacional reafirma su compromiso de contribuir al desarrollo y progreso de los más de 30 asentamientos indígenas en el suroriente colombiano; y velar por la protección de los derechos humanos.