La E.S.E. Departamental ‘Solución Salud’ rechazó contundentemente los actos de vandalismo y ataque contra la misión médica ocurridos en la madrugada de este lunes en Barranca de Upía y exigió respeto por el cuerpo de profesionales y las instalaciones de sanidad en los municipios.
De acuerdo al relato del cuerpo médico, sobre la 1:30 a.m. ingresó un paciente herido por arma corto punzante en la espalda profunda y sangrante, producto de una riña callejera, el cual es trasladado de inmediato a urgencias en donde los médicos trataron de suturar y estabilizar, pues debería trasladado a un centro primario por el abundante sangrado.
Sin embargo, al momento de suturar, ingresó un segundo paciente que estaba involucrado en la riña con una herida en la mano. En el instante en que se dan cuenta de que allí estaba el otro herido involucrado en el altercado, el segundo llama a amigos, quienes llegan a las instalaciones y empiezan a destruir las instalaciones y a agredir al personal médico.
Aproximadamente 50 o 60 personas empezaron a destruir las instalaciones, por lo que de inmediato se llamó a la Policía, procediendo a controlar la riña hasta después de las 3:30 a.m.
Los repudiables hechos dejaron como resultado un médico con fractura de antebrazo derecho, que además de agredido fue amenazado con cuchillo durante los hechos. Por si fuera poco violentaron verbalmente y amenazaron de muerte a la auxiliar, al médico agredido, a otra médica y al director del hospital local al que le dieron 24 horas para que abandone el municipio.
«Lo grave de esta situación, es que los dos médicos que estaban en el servicio de urgencias la noche anterior me acaban de renunciar, dicen que no continúan en el municipio y ese es el inconveniente que vamos a tener para poder volver a dar el servicio de urgencias, porque es manejado por rurales y esas plazas no son fáciles de reemplazar», afirmó Hernán Mojica Molinares, gerente de la E.S.E Departamental del Meta ‘Solución Salud’.
Además, la sala de urgencias está totalmente destruida sumado a otras áreas del hospital que fueron afectadas por el irracional ataque.
Mojica Molinares reiteró que la misión médica debe ser respetada y mantenida al margen de cualquier conflicto y libre de la violencia delincuencial, pues su único objetivo es salvar vidas.