
Con actividades de limpieza y embellecimiento en Villavicencio se declaró Día Cívico como preámbulo al cumpleaños 183 de la ciudad, en el marco de la conmemoración del Día del Caño Gramalote.
El caño Gramalote tiene su propia fiesta para recordarles a los ciudadanos su relevancia histórica, además, para crear conciencia en torno al cuidado de las fuentes hídricas y no dejar olvidar que al costado de sus 9.600 metros se comenzó a conformar lo que hoy es la capital del Meta.
«El último viernes del mes de marzo, como lo establece el Acuerdo 356 del 2018, estamos celebrando el día de nuestro caño fundacional. La Secretaría de Medio Ambiente ha desarrollado una agenda muy especial que incluye pintar el mural del agua en un punto neurálgico de la ciudad, en el parque de la Cruz», destacó Sara Cabrera, secretaria de Medio Ambiente de Villavicencio.
Allí la gente identificará la nutria de río que se encuentra en el caño Gramalote y la idea de esto es comenzar a apropiar nuestra biodiversidad, agregó.
Además de la jornada de embellecimiento, se desarrolló recolección de basura en la longitud del caño, charlas sobre el cuidado y preservación del agua, y a las cuatro de la tarde se desarrollará una rumba aeróbica en el parque de la Cruz.
El caño Gramalote nace y muere en el perímetro urbano de Villavicencio. Es el único caño canalizado que tiene la capital del Meta. Además, sus aguas desembocan en el río Guatiquía, bañando el río Meta y atravesando los departamentos de Casanare y Vichada para terminar en el Orinoco.