La eficacia con la cual actuaron fiscales del Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato
Animal (Gelma) de la Fiscalía General de la Nación, permitió que en Caldas un juez condenara
a un hombre que le disparó a un canino. En otro proceso, esta vez en Cundinamarca, una
persona fue judicializada por causarle múltiples heridas con arma cortopunzante a una yegua.
Justicia para Killer
La contundencia de las pruebas recaudadas por la Fiscalía permitió que Darío Bolaños Arenas,
mediante preacuerdo, aceptará su responsabilidad en los delitos de maltrato animal, y
fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
El procesado reconoció que el 11 de septiembre de 2020; en una vía del municipio de
Marmato (Caldas), desenfundó un arma de fuego y disparó en dos oportunidades contra Killer,
el animal de compañía de unos vecinos. La acción, al parecer, obedeció a que el canino mordió
levemente a su agresor cuando este se movilizaba en una motocicleta.
El hombre fue sentenciado a 5 años de prisión. Actualmente, Bolaños se encuentra privado de
la libertad en centro carcelario, cumpliendo una condena de 11 años por otros hechos en los
cuales debe responder por los delitos de tentativa de homicidio y porte ilegal de armas.
Agresión a ‘Arcoíris’
La Fiscalía logró establecer que el 20 de febrero de 2022 Yeferson Humberto González
Quiroga, al parecer, agredió en 14 ocasiones con un arma blanca a una yegua llamada Arcoíris.
Los hechos se presentaron en un criadero de caballos de la vereda La Mesita de San Juan de
Rioseco (Cundinamarca). Las indagaciones adelantadas evidenciaron que el animal se
encontraba en estado de gestación y que a raíz de las heridas causadas sufrió traumas en
vértebras lumbares, sacras y tórax; hipotensión, taquicardia y pérdida considerable de
volumen sanguíneo.
La equina recibió atención veterinaria de urgencias evitando su muerte; sin embargo, la
agresión le generó problemas en su movilidad. Por estos hechos González Quiroga fue
imputado por el delito de maltrato animal agravado, cargo que no fue aceptado.